La MUD le lavó la cara
|Con el “diálogo”, ganó la MUD, el gobierno nacional y la comunidad internacional, pero, perdimos por ahora los 30 millones de venezolanos; por ahora, porque nuestros héroes, los valientes estudiantes, ávidos de independencia, pronto conquistarán nuestra libertad.
¿Por qué absolutamente nadie documentó al menos un par de casos de tortura con el apoyo del Foro Penal Venezolano?
¿Por qué no se llevaron a Miraflores los tantos casos de represión y homicidios, como el de los asesinos de Bassil Da Costa, plenamente identificados el propio 12F en video, o el caso cruel de Geraldine Moreno, asesinada con perdigonazo en la cara a quemarropa? ¿Qué pasó que se olvidaron de José Mendez, atropellado por una camioneta de PDVSA, con su asesino plenamente identificado y libre? ¿Y qué con la funcionaria de la GNB, completamente identificada, que golpeó brutalmente con un casco a Marvinia Jiménez? ¿Qué pasó que nadie mencionó la violación con fusil a Juan Carrasco, o el caso del asesinato más cruel, el de la reportera de Venevisión embarazada, Adriana Urquiola, entre otros casos con culpable reconocido y confeso?
¿Por qué nadie enfatizó acerca de la opresión del régimen cubano, mencionó a R. Castro, o pronunció frases como representantes de La Habana, militares apátridas y patriotas, o soberanía nacional?
¿Por qué Capriles no pronunció la palabra fraude, dejándole en bandeja de plata la oportunidad de legitimar al CNE a Jorge Rodríguez?
¿Por qué nadie mostró fotos u ofreció entregar algún video del ataque de los colectivos a Los Ruices, o a las ventanas de los edificios en el 23 de Enero, La Isabelica en Valencia, Caricuao, o Petare? ¿Por qué nadie habló de delitos de lesa humanidad, represión, tiranía, y narcoestado?
A cambio de desahogarse, sobrevivir políticamente y negociar puestos en el CNE y TSJ (según abiertamente se ha declarado en los últimos días), la MUD le fue muy útil al gobierno nacional al lavarle la cara e ir al “diálogo”. De hecho, hasta la noche del 10A, a nivel nacional e internacional, el gobierno era considerado dictadura cruel y represiva, que violaba abiertamente los derechos humanos (inclusive se había solicitado la investigación por crímenes de lesa humanidad en La Haya y diputados de los EEUU discutieron la imposición de sanciones a miembros del gobierno); mientras que ahora, el régimen es considerado solo un gobierno malo e ineficiente, pero dispuesto a “dialogar”. Las implicaciones son obvias. Lo primero suponía necesariamente la obligación de la comunidad nacional e internacional de actuar para dar al traste con la terrible dictadura, mientras lo segundo implicaría ahora tener que esperar hasta las próximas elecciones (exactamente lo que el gobierno y la MUD buscaban: sobrevivir y estabilizarse). Pero, obviamente, el país nacional no puede ni va a esperar.
En fin, con el “diálogo” ganaron la MUD, el gobierno y la comunidad internacional; pero, perdieron 30 millones de personas (fuese distinto si hubiese sido diálogo auténtico). Con el “diálogo” ganó la MUD (o, al igual que el gobierno, cree haber ganado la MUD), al buscar garantizar su supervivencia política, haber quedado “bien” frente al país, y logrado un par de cargos en el CNE y el TSJ. Ganó el gobierno, porque, con el “diálogo”, pasó de ser considerado malo, ineficiente, dictatorial, y violador de derechos humanos a ser tan solo malo e ineficiente como ya todo el mundo sabía. Y, ganó también la comunidad internacional porque ahora no se verá obligada a asumir ningún riesgo y podrá optar por la inacción (el costo de un país de no hacer nada ahora resulta bajo, puesto que ahora se puede sostener que el gobierno nacional ha mostrado disposición a dirimir los conflictos por la vía del diálogo en substitución a la represión). Finalmente, perdimos los 30 millones de personas (i.e. la gran mayoría), pues ahora el trabajo de los últimos 2 mes de los estudiantes para deslegitimar al gobierno en Venezuela y el exterior (vale destacar también el trabajo y esfuerzo de nuestra valiente María Corina Machado), ha sido saboteado en tan solo una noche.
Sin embargo, no todo es tan grave. La desesperación del gobierno nacional, por un lado, y la persistencia de los estudiantes, por el otro, hará velozmente retornar el río a su cauce. La legitimación y estabilización del régimen (i.e. del sistema gobierno nacional-MUD), no tengo la menor duda, durará muy poco; y nuestros héroes, los valientes estudiantes, ávidos de independencia, conquistarán nuestra libertad.
Ángel García Banchs